"Cumbre pro-estadidad en Washington: Sin avances concretos y con dudas sobre su costo"

Fuente: Programa Hoy Mismo con Alfonso Giménez Luchetti, transmitido por WPAB 550 AM.

La reciente cumbre pro-estadidad celebrada en la capital federal y encabezada por la gobernadora de Puerto Rico, Jennifer González, ha generado una ola de críticas por parte de analistas políticos y sectores de la oposición, quienes califican el evento como un "espectáculo político sin resultados tangibles".

A pesar de las declaraciones optimistas de la gobernadora, la cumbre no produjo compromisos concretos por parte del Congreso de los Estados Unidos en torno a la estadidad para Puerto Rico. Legisladores republicanos y demócratas han evitado pronunciamientos firmes sobre el futuro de la isla, reforzando la percepción de que el tema continúa sin ser una prioridad en la agenda política de Washington.

"Una estrategia sin fundamentos"

Para algunos expertos, la falta de avances reales en la cumbre refleja una estrategia política poco efectiva. Según el analista político José Varela, la estadidad no tiene el respaldo suficiente dentro del Congreso, y estos eventos terminan siendo más simbólicos que efectivos.

"El Partido Republicano no tiene interés en admitir a Puerto Rico como estado, y el Partido Demócrata, aunque ha mostrado apoyo en el pasado, tiene otras prioridades políticas. Gastar dinero en eventos como este sin un plan concreto para generar apoyo legislativo es un desperdicio de recursos públicos", afirmó Varela.

Además, se cuestiona la pertinencia de la cumbre en un momento en que figuras influyentes, como el expresidente Donald Trump y el empresario Elon Musk, han expresado su oposición a la estadidad de Puerto Rico, vinculándola a un intento de los demócratas de obtener más poder en el Congreso.

¿Gasto público sin justificación?

Otro de los puntos más criticados es el uso de fondos públicos para financiar la participación del gobierno de Puerto Rico en la cumbre. Aunque no se ha revelado una cifra oficial del costo total del evento, se estima que incluyó gastos de viaje, alojamiento y dietas para funcionarios y cabilderos.

"El pueblo tiene derecho a saber cuánto costó este viaje y qué beneficios concretos se obtuvieron. Hasta ahora, solo hemos visto fotos y comunicados de prensa, pero ninguna acción real en el Congreso que demuestre que esto fue más que un ejercicio de relaciones públicas", expresó la senadora de oposición, María de Lourdes Guzmán.

Esta no es la primera vez que una delegación boricua viaja a Washington en un esfuerzo por promover la estadidad sin obtener resultados significativos. El precedente más reciente ocurrió con los cabilderos de la estadidad, quienes recibieron millones de dólares en fondos públicos para abogar por la admisión de Puerto Rico como estado, pero no lograron avances concretos en el Congreso.

Un evento sin impacto legislativo

Mientras tanto, la gobernadora González ha defendido la cumbre, asegurando que fue una oportunidad para reafirmar el compromiso del pueblo de Puerto Rico con la estadidad. Sin embargo, la falta de reuniones oficiales con líderes clave del Congreso deja en evidencia que el evento tuvo más un propósito simbólico que legislativo.

Con un Congreso dividido y sin consenso sobre la cuestión del estatus de Puerto Rico, las posibilidades de que se avance en un proceso de estadidad siguen siendo mínimas. En este contexto, las críticas a la cumbre en Washington reflejan el escepticismo de muchos sobre la viabilidad de la estrategia actual del gobierno de Jennifer González en su lucha por la anexión de la isla a Estados Unidos.